Andaluces jaraneros y ruidosos...se abren las puertas correderas y entran en tropel ...para la mayoría supongo que era su primera vez -para mí , lo fue- moverse por las entrañas de la ciudad , un viajecito en metro.
Sobredosis de multiculturalidad, amplio y variopinto muestrario de razas... todos callados...cada cual a lo suyo, unos dormían o se lo hacían, otros leían, pero nadie comentaba, brazo con brazo, pero el vecino no existe , miradas al frente perdidas en la nada... y un graffiti en el cristal de una ventana...Souriez, Vous êtes tristes (Sonrían, están ustedes tristes). No olvidaré esa frase en mi vida.
Y no describo una escena de antesdeayer en cualquier metro de Madrid, o de cualquier otra parte...yo tenía 17 años, era el año 83 y estábamos en París.
Ni olvido la frase, ni olvidaré la sensación que lleva adosada...porque esta misma semana la frase ha vuelto.
Sin metro...escenario? una sala de profesores.
Sin abstraidos viajeros...los cambiamos por profesores; cada uno a lo suyo, muchos crispados, bastantes enfadados con su suerte de horario, otros simplemente indiferentes al hecho de tener a otros compañeros al lado...Mal rollito.
Es viernes..allí nos vemos los propietarios de un hueco a 5ª hora y agraciados con clase a 6ª... vaya suertaza!!...allí nos vemos cuando hay una hermosa cafetería en la planta baja, que a esas horas deja escapar auténticos aromas... en la triste sala nos vemos cuando podríamos estar un pelín más agusto... aún recuerdo los sanviernes de Mancha Real, donde se contaban los mejores chistes, se relajaban humores y durante un ratito, se convivía.
Por qué no para el próximo viernes? Lo propondré...quizás me dé de bruces...cuche usted, la recién llegada , proponiendo...ricas viandas regadas con frescos caldos 0,0 y aderezadas de buen ambiente...
Anatorres. Re-creando momentos
