A mi hija
DIECISIETE YA.
DIECISIETE YA.
Al camino que labramos para ella, que limpiamos de piedras y malas-yerbas,
que allanamos con amor y esmero
empiezan a salirle sus naturales vereítas,
que ella quiere explorar...
Abrazarás nuevos intereses, debes hacerlo,
pero no dejes de sentir fuerte estas manos que nunca te soltarán;
querrás buscar tu propio norte, hija mía,
sentir tu propio viento a la cara
...y la vida,
pero mira hacia detrás a menudo:
comprobarás que ahí estaremos siempre tus padres, atentos,
para que ningún aire apague las luces del camino a casa.
Recreando Momentos